martes, 15 de enero de 2019

EVANGELIO DEL DÍA: 15 de Enero de 2019

Hb 2,5-12/Mc 1,21-28
Llegaron a Cafarnaún, y el sábado entró Jesús en la sinagoga y comenzó a enseñar. La gente se admiraba de cómo les enseñaba, porque lo hacía con plena autoridad y no como los maestros de la ley. En la sinagoga del pueblo, un hombre que tenía un espíritu impuro gritó: “¿Por qué te metes con nosotros, Jesús de Nazaret? ¿Has venido a destruirnos? Yo te conozco. ¡Sé que eres el Santo de Dios!”. Jesús reprendió a aquel espíritu, diciéndole: “¡Cállate y sal de este hombre!”. El espíritu impuro sacudió con violencia al hombre, y gritando con gran fuerza salió de él. Todos se asustaron y se preguntaban unos a otros: “¿Qué es esto? ¡Enseña de una manera nueva y con plena autoridad! ¡Hasta a los espíritus impuros da órdenes, y le obedecen!”. Muy pronto, la fama de Jesús se extendió por toda la región de Galilea.
*Palabras del Señor *
COMENTARIO

Jesús enseña con autoridad.
En todo momento y ocasión, Jesús enseña; su vida entera es una cátedra permanente con la fuerza de su testimonio y su convicción. Su enseñanza: 1) provoca admiración: no estaban acostumbrados a oír hablar de esta manera; 2) manifiesta autoridad: lo que decía era indiscutible, tenía tal fuerza de credibilidad, que nadie podía discutirlo; 3) supone novedad: los maestros de la ley hablaban, decían y explicaban, pero eran diferentes a Jesús. En Jesús se muestra el Bien enfrentado con el mal. Él era el Bien y era reconocido por el mal, quienes estaban esclavizados y poseídos por el mal eran liberados. Eso causó que la gente conociera su fama y sintiera admiración por Él. ¿Qué nos dice a nosotros?
*Oración 🙏🏻*
Cada uno lo haga..
Feliz martes 

lunes, 14 de enero de 2019

EVANGELIO DEL DÍA: 14 de Enero de 2019

Hb 1,1-6/Mc 1, 14-20
En aquel tiempo, después que metieron a Juan en la cárcel, Jesús fue a Galilea a anunciar las buenas noticias de parte de Dios. Decía: “Ha llegado el tiempo, y el reino de Dios está cerca. Volveos a Dios y aceptad con fe sus buenas noticias”. Paseaba Jesús por la orilla del lago de Galilea, cuando vio a Simón y a su hermano Andrés. Eran pescadores y estaban echando la red al agua. Les dijo Jesús: “Seguidme, y os haré pescadores de hombres”. Al momento dejaron sus redes y se fueron con él.

sábado, 12 de enero de 2019

EVANGELIO DEL DÍA: 12 de Enero de 2019

1Jn 5,14-21
Jn 3,22-30

Después de esto, Jesús fue con sus discípulos a la región de Judea, donde pasó algún tiempo con ellos, bautizando. También Juan estaba bautizando en Enón, cerca de Salim, donde había mucha agua. La gente acudía y era bautizada. Esto sucedió antes que metieran a Juan en la cárcel. Por entonces, algunos de los seguidores de Juan comenzaron a discutir con un judío sobre la cuestión de las purificaciones, y fueron a decirle a Juan: “Maestro, el que estaba contigo al oriente del Jordán, aquel de quien nos hablaste, ahora está bautizando y todos le siguen”. Juan les dijo: “Nadie puede tener nada si Dios no se lo da. Vosotros mismos me habéis oído decir claramente que yo no soy el Mesías, sino que he sido enviado por Dios delante de él.

viernes, 11 de enero de 2019

EVANGELIO DEL DÍA: 11 de Enero de 2019


1Jn 5,5-13
Lc 5,12-16
Un día estaba Jesús en un pueblo donde había un hombre enfermo de lepra. Al ver a Jesús se inclinó hasta el suelo y le rogó: “Señor, si quieres, puedes limpiarme de mi enferme­dad”. Jesús lo tocó con la mano, diciendo: “Quiero. ¡Queda limpio!”. Al momento se le quitó la lepra al enfermo, y Jesús le ordenó: “No lo digas a nadie. Solamente ve, preséntate al sacerdo­te y lleva por tu purificación la ofrenda que ordenó Moisés, para que todos sepan que ya estás limpio de tu enfermedad”. Sin embargo, la fama de Jesús se extendía cada vez más, y mucha gente se juntaba para oírle y para que sanase sus enfermedades. Pero Jesús se retiraba a orar a lugares apartados.

*Palabras del Señor

COMENTARIO

jueves, 10 de enero de 2019

EVANGELIO DEL DÍA: 10 de Enero de 2019

1Jn 4,19–5,4
Lc 4,14-22a

Jesús volvió a Galilea lleno del poder del Espíritu Santo, y su fama se extendía por toda la tierra de alrededor. Enseñaba en la sinagoga de cada lugar, y todos le alababan. Jesús fue a Nazaret, al pueblo donde se había criado. Un sábado entró en la sinagoga, como era su costumbre, y se puso en pie para leer las Escrituras. Le dieron a leer el libro del profeta Isaías, y al abrirlo encontró el lugar donde estaba escrito: “El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha consagrado para llevar la buena noticia a los pobres; me ha enviado a anunciar libertad a los presos y a dar vista a los ciegos; a poner en libertad a los oprimidos; a anunciar el año favorable del Señor”.

miércoles, 9 de enero de 2019

EVANGELIO DEL DÍA: ❤9 de Enero de 2019

1Jn 4,11-18
Mc 6,45-52

En aquel tiempo, Jesús hizo que sus discípulos subieran a la barca, para que llegaran antes que él a la otra orilla del lago, a Betsaida, mientras él despedía a la gente. Y cuando la hubo despedido, se fue al monte a orar. Al llegar la noche, la barca ya estaba en medio del lago. Jesús, que se había quedado solo en tierra, vio que remaban con dificultad porque tenían el viento en contra. De madrugada fue Jesús hacia ellos andando sobre el agua, pero hizo como si quisiera pasar de largo. Ellos, al verle andar sobre el agua, pensaron que era un fantasma y gritaron, porque todos le vieron y se asustaron. Pero él les habló en seguida, diciéndoles:

martes, 8 de enero de 2019

EVANGELIO DEL DÍA: 8 de Enero de 2019

1Jn 4,7-10
Mc 6,34-44

En aquel tiempo, al bajar Jesús de la barca, vio la multitud, y sintió compasión de ellos porque estaban como ovejas que no tienen pastor; y comenzó a enseñarles muchas cosas. Por la tarde, sus discípulos se le acercaron y le dijeron: “Ya es tarde, y éste es un lugar solitario. Despide a la gente, para que vayan a los campos y las aldeas de alrededor y se compren algo de comer”. Pero Jesús les contestó: “Dadles vosotros de comer”. Respondieron: “¿Quieres que vayamos a comprar doscientos denarios de pan para darles de comer?”. Jesús les dijo: “¿Cuántos panes tenéis? Id a verlo”. Cuando lo averiguaron, le dijeron: “Cinco panes y dos peces”.