Los juzgados dignos de la vida futura son los que conquistan el corazón de Dios gracias al fiel cumplimiento de sus mandatos, los dignos de estar en su presencia, los puros de corazón, que han sabido superar las tentaciones del mal y permanecieron fieles, gracias a su fe. El futuro ganado es lo importante y no la manera de como viviremos futuramente. Existe una promesa de vida futura y eterna que Cristo nos mostró con su resurrección, es el lugar donde Dios está con todo su Esplendor y Gloria. Cristo es el camino, la verdad y también la vida. Ganar el cielo es lo importante, no es, ni será fácil alcanzarlo, pero tampoco es imposible. Pidamos al Señor nos ayude a lograrlo.
Feliz y bendecido día.
Del Evangelio. Lucas 20, 27-40.
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