La misericordia y el perdón de Dios no tienen límites, porque su amor supera todo, por eso su llamada al cobrador de impuestos, Mateo, para ofrecerle una oportunidad de redención, de cambio, ya que era una persona conocida por su mal andar, pues se aprovechaba de su trabajo de cobrador de impuestos para llenarse del dinero ajeno.
Jesús tuvo la critica de muchos, con esta acción, pero, Él no vino para llamar a los justos sino a pecadores, vino a buscar el cambio en el hombre, a enseñarnos un camino diferente, donde la honestidad vale mucho a los ojos de Dios. Tal vez, en gran o menor proporción, somos también Mateo y como él, Dios nos da y dará también la oportunidad de cambiar nuestra forma de vida y dejemos de hacer lo que no debemos. Feliz y bendecido dia. Del Evangelio. Mateo 9, 9-13.
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