Sabiendo Herodes que Juan era una persona de bien, que predicaba y defendía con valentía la verdad, por la tentación hacia una mujer, por su embriaguez y por el compromiso que asumió sin medir sus palabras, mandó matar a un inocente, a Juan el Bautista.
Así actúa la maldad, busca una ocasión para eliminar al que le estorba y se pone delante de sus proyectos de maldad, Así cae el hombre, porque no tuvo la preparación adecuada, la disciplina de vida, la oración permanente ante la tentación del mal que sabe nuestra debilidad y se presenta de mil formas para engañar y quitarnos del camino verdadero. Juan el Bautista cumplió a cabalidad su ideal, predicó y murió por una justa causa y Dios lo elevó a sus altares, hoy su nombre esta escrito en el libro de la vida. Que su amor a Dios, su coraje de denunciar lo ilícito y su entrega generosa a Dios, sean para nosotros el espejo a seguir en la lucha por la defensa de la verdad, del amor y de todo lo que viene de Dios.
Feliz y bendecido dia.
Del Evangelio. Marcos 6, 17-29.
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