Al comenzar el nuevo día, te pido que me ayudes, que me libres de todo mal, de todo peligro y de todo pecado; que sean buenas mis palabras, mis miradas, mis sentimientos, mis acciones y el fondo de mi corazón.
Te ofrezco Señor, todos mis pensamientos, obras y trabajos de este día. Bendícelos a fin de que no haya ninguno que no sea hecho por tu amor. Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario