"1Re 11,29-32; 12,19
Mc 7,31-37"
Evangelio:
"Jesús volvió a salir de la región de Tiro y, pasando por Sidón y los pueblos de la región de Decápolis, llegó al lago de Galilea. Allí le llevaron un sordo y tartamudo, y le pidieron que pusiera su mano sobre él. Jesús se lo llevó a un lado, aparte de la gente, le metió los dedos en los oídos y con saliva le tocó la lengua. Luego, mirando al cielo, suspiró y dijo al hombre: “¡Efatá! (es decir, ‘¡Ábrete!’)”. Al momento se abrieron los oídos del sordo, su lengua quedó libre de trabas y hablaba correctamente. Jesús les mandó que no se lo dijeran a nadie; pero cuanto más se lo mandaba, tanto más lo contaban ellos.
Llenos de asombro, decían: “Todo lo hace bien. ¡Hasta hace oír a los sordos y hablar a los mudos!”."
Palabras del Señor
Comentario:
Un sordo y tartamudo era una persona que tenía algo más que un problema físico, porque no se podía comunicar. Estaba aislado de los demás, en un mundo cerrado. Esto nos puede suceder a todos, aunque tengamos la lengua y los oídos sanos. Puesto que el sordo no podía escuchar sus palabras, Jesús se comunicaba con él a través del tacto, tocando sus oídos y su lengua. Así, comunicándose con él a su manera, le hizo capaz de volver a comunicarse con los demás. La expresión de la gente “todo lo hizo bien” muestra que en Jesús se manifiesta el poder creador de Dios, que al crear el mundo veía que todo “era bueno”. Así se muestra que la obra de Jesús restaura la bondad de la creación.
Oración
Señor, ven a restaurar tu Creación, especialmente restaura mi corazón...Amén..
Feliz viernes
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