Humillarse es el acto de reconocer que ante Dios no somos nada..

Humillarse es el acto de reconocer que ante Dios no somos nada y ser humilde, es ponerse a la altura de los demas sin creerse mas que ellos. Como hijos de Dios, somos llamados a vivir en paz, amor y armonía con nuestros hermanos, pero, si nuestra actitud es la de creernos mas que ellos y actuamos como si fuéramos el maestro, el sabelo todo; entonces es difícil la buena relación, porque generaríamos el rechazo de la gente. Sólo la actitud humilde llega al corazón y convence de verdad.

Cristo, siendo el hijo de Dios, se hizo uno mas entre los hombres y cuando llego su tiempo de predicar y enseñar la buena nueva; no lo hizo en son de trompetas para ganar fama, prestigio, ni para recibir aplausos, todo lo hizo con amor y sin buscar engrandecerse. Pidamos a Dios nos conceda la gracia de ser humildes, sencillos y sin buscar aparentar. Reconozcamos que somos sus hijos y actuemos en consecuencia conforme a sus enseñanzas, siempre con amor, humildad y fe. 

Feliz y bendecido día. 

Del Evangelio. Mateo 23, 1-12.